jueves, 24 de julio de 2014

DEL BILINGÜISMO Y DE LOS BILINGÜES








· Según uno de los preceptos de la ley mosaica, no se debe tomar el nombre de Dios en vano. Ahora bien, en Cataluña, no parece que los miembros y “miembras” de la casta política, de los sindicatos, de asociaciones varias e incluso muchos de los profesionales de la enseñanza sean respetuosos con este precepto “desacralizado”. Y lo mismo puede decirse de muchos padres mal informados y manipulados. En efecto, cuando de cuestiones lingüísticas se trata, todos utilizan, casi siempre o siempre,  el verbo en vano. Hoy quiero centrarme en el uso y abuso de los términos “bilingüismo” y “bilingüe”.

· En Cataluña y también en las otras CC. AA. con dos lenguas co-oficiales, hay muchas personas (cf. ut supra) que utilizan la enseñanza y el sistema educativo como un medio para conseguir objetivos políticos y no, como debería ser, para que eclosionen y se desarrollen todas las potencialidades de los niños, de los jóvenes y de los ciudadanos. Entre otras muchas, están las potencialidades lingüísticas, que son fundamentales, básicas y condición sine qua non, para formar y preparar a los ciudadanos de Cataluña. De estas capacidades lingüísticas dependen, en efecto, el presente formativo y el futuro laboral, económico y social tanto de los jóvenes estudiantes como de los futuros ciudadanos y trabajadores.

· Cuando se abordan cuestiones lingüísticas, los “pecadores” precitados repiten, como un mantra, como los de Fuenteovejuna, las mismas incongruencias o mentiras, que repugnan al sentido común, a la lógica más elemental y a las aportaciones de las ciencias del lenguaje y de la educación; y que entran en contradicción, además, con las constataciones empíricas. A pesar de esto, ellos repiten y repiten que “el modelo de inmersión ha sido y es un modelo de éxito”, que los “alumnos dominan las dos lenguas” al final de la escolaridad, que no hay diferencias en las competencias lingüísticas en español entre los jóvenes españoles de Cataluña y los de otras CC. AA. monolingües,… En suma, que los jóvenes españoles de Cataluña son bilingües: dominan y practican el bilingüismo catalán-español o español-catalán, tanto monta, monta tanto. ¡Qué forma de utilizar el verbo en vano! Veamos.

· Los términos “bilingüismo” o “bilingüe”, como por otra parte cualquier otra unidad lingüística, están preñados de significados distintos, y denotan o refieren a realidades extralingüísticas muy diferentes. Por eso, merece la pena detenerse a analizar los contenidos semánticos de estos dos vocablos y el uso interesado y partidista que se hace de ellos por parte de los defensores del modelo de inmersión lingüística. En efecto, ¿de qué tipo de “bilingüe” o de “bilingüismo” están hablando aquellos que aseveran que el modelo de inmersión lingüística  es un modelo de éxito que conduce al bilingüismo, a un dominio equilibrado de las dos lenguas? Ante la falta de una definición precisa, operativa y aceptada por todos, los lingüistas hemos abandonado la empresa de elaborar nuevas definiciones del bilingüismo. Y, por eso, se prefiere proponer tipologías, que ponen el acento sobre aspectos particulares del contacto de lenguas.

· BILINGÜISMO SOCIAL E INDIVIDUAL. El bilingüismo es una de las consecuencias del contacto de lenguas. En efecto, hablar de bilingüismo o contacto de lenguas es referirse a la presencia simultánea de dos lenguas en una comunidad humana (Cataluña, por ejemplo) o en una persona determinada (muchos de los ciudadanos de Cataluña). El lugar del contacto de las lenguas está en el origen de una primera tipología básica del bilingüismo, que distingue el bilingüismo social o de grupo y el individual. Ahora bien, el concepto de “bilingüismo individual” es un concepto relativo o variable. En efecto, aquellos que calificamos de bilingües tienen, en general, competencias lingüísticas diferentes en las dos lenguas. Por eso, se suelen distinguir diferentes grados y, por lo tanto, diferentes tipos de bilingüismo individual, que van desde un “bilingüismo maximalista” (el locutor bilingüe tiene un comportamiento de locutor nativo en las dos lenguas, Bloomfield dixit) a un “bilingüismo minimalista” (el locutor bilingüe sólo tiene una competencia mínima en alguno de los cuatro skills (competencias lingüísticas básicas: comprender, hablar, leer y escribir) de una de las lenguas, según Macnamara).

· TIPOLOGÍA DE BILINGÜISMOS INDIVIDUALES. Entre estos dos tipos extremos de bilingüismo, se da una variada gama de bilingüismos intermedios, que dependen de una serie de factores (nivel lingüístico conseguido, edad de adquisición, estatus sociocultural de las dos lenguas, adhesión e identificación cultural y lingüística, etc.). En función del nivel lingüístico alcanzado, se distinguen también dos tipos. Por un  lado,  el bilingüismo equilibrado (o perfecto o ambilingüismo o equilingüismo): el bilingüe tiene una competencia equivalente en las dos lenguas y, por lo tanto, puede funcionar eficazmente con cada una de ellas; excepto en casos muy excepcionales, se trata de una utopia, de un bilingüismo ideal; y se correspondería con el “bilingüismo maximalista” de Bloomfield (cf. ut supra). Y, por el otro, el bilingüismo desequilibrado (o imperfecto o asimétrico o dominante): aquí, la competencia lingüística en las dos lenguas es diferente; en efecto, siempre hay una lengua, en principio la lengua materna, en la que la competencia lingüística es mayor; este bilingüismo desequilibrado responde a una concepción relativista, pero realista y objetiva.

· TIPOLOGÍA DE BILINGÜISMOS INDIVIDUALES IMPERFECTOS. A partir de este relativismo realista del bilingüismo imperfecto, se suelen distinguir diferentes niveles de desequilibrio en las competencias del locutor bilingüe y, por lo tanto, nuevos tipos de bilingüismo. Entre éstos, hay que citar el “semilingüismo”: concepto elaborado por lingüistas finlandeses y suecos para caracterizar las producciones lingüísticas en finlandés y en sueco de niños finlandeses residentes en Suecia. Estos niños tenían lagunas y experimentaban importantes retrasos, tanto en L1 (finlandés) como en L2 (sueco), en relación con sus camaradas monolingües (finlandeses y suecos). Estos niños eran a medias o parcialmente bilingües (cf. “semi”= medio). Este “semilingüismo” está más próximo del llamado bilingüismo funcional minimalista que del maximalista (cf. ut supra) y del “bilingüismo sustractivo o negativo” (el aprendizaje de una L2 se hace en detrimento de la L1, la materna) que del aditivo o positivo.

· Este bilingüismo depauperado y desequilibrado es el que propicia el tan cacareado “modelo de inmersión” o de “escuela catalana”, que puede y debe ser puesto en relación con la “hipótesis del déficit” y la “teoría de los dos códigos” de B. Berstein. En efecto, las producciones lingüísticas, tanto en catalán como en español, de los jóvenes españoles de Cataluña denotan tales lagunas y deficiencias que uno está habilitado para hablar de “semilingüismo” y de “diglosia”. Además, si nos fijamos en los contenidos culturales o enciclopédicos (Umberto Eco) adquiridos por los escolares catalanes y vehiculados por sus producciones lingüísticas rencas, habría que hablar también de bilingüismo “acultural” y “anómico”, tanto en español como en catalán. Los correctores de las PAU corroboran tanto lo uno como lo otro y lo mismo constatamos, cada año, en las nuevas hornadas de estudiantes que llegan a la universidad. Por lo tanto,  tildar de “modelo de éxito” al “modelo de inmersión de la escuela catalana” es tomar el verbo en vano, es un sarcasmo, una tergiversación y una manipulación de la realidad, apreciación avalada también por un estudio de campo de la Fundación Jaume Bofill, que no es sospechosa de ser anticatalanista: “Catalunya té un dels nivells d’abandonament escolar prematur més elevat de la Unió Europea, i un dels nivells de formació de la població jove més baix’.

Coda: « Je ne demande pas à être approuvé, mais à être examiné et, si l’on me condamne, qu’on m’éclaire » (Ch. Nodier).

© Manuel I. Cabezas González
Publicado en Elespiadigital.com, Bembibre Digital, Cerdanyola Informa y Cerdanyola al Día.
24 de julio de 2014

8 comentarios:

  1. Mi muy apreciado faro de Alejandría,
    hace días que no contestaba a tus comentarios, pero quiero explicar que ha sido por causas de esa "expansión industrial catalana" que "ha conseguido el Sr. Más". Como no puedo acentuar la ironía en mis palabras, la entrecomillo, con la esperanza que se vea mejor.
    Como siempre, tienes mucho, o casi toda, razón. Además del mal uso de los términos, está el mal uso de la previa terminología en sí. Personalmente me molesta de manera indecente, la importancia que se le da al dominio de una lengua de 3-4 millones de personas (no todos los residentes en Catalunya son catalanoparlantes), frente a una lengua de unos cuantos centenares de millones de usuarios. Ambas deben coexistir, pero el empecinamiento de darle más importancia a la que claramente es minoritaria, solo sería comparable a la insistencia de la lectura del "Mein Kampf" en las sinagogas judías, ante la exclamación de "hay que conocer al enemigo". Las lenguas son seres vivos, que se alimentan de su alrededor y se simbiotizan con su ambiente. Si la lengua es buena, es fácil, es correcta y es representativa, vivirá y crecerá, y será cuidada. Si no lo es, morirá, como todo en este ciclo vital. Querer que algo viva cuando no está destinado a ello es antinatura, y está condenado al fracaso, y en caso contrario, es decir, si ha de vivir, promocionarlo es una pérdida de tiempo, ergo, cualquier cosa que se haga en esa dirección es una pérdida de tiempo. A decir verdad, agradezco los esfuerzos del Sr. Más y del resto de excelentes políticos que tenemos en esta esquina noreste, sus esfuerzos en este campo, y no que pierdan el tiempo en la expansión industrial y cultural catalana, o en la absurda labor de mejorar la sanidad pública, o en la no menos ignominiosa tarea de crear empleo. Veo que saben mantener su sitio y su objetivo. Ah......., que sería la vida sin un faro delante de nuestros ojos....

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sr. Torres,

      • Es Ud. demasiado generoso conmigo al tildarme de “faro de Alejandría”. Digamos, más bien, que mis textos son llama de vela que titila en un firmamento de indocumentados y/o malintencionados manipuladores cuando de cuestiones lingüísticas se trata. Me encuentro a un tiro de piedra de Babia —en sentido propio, no en sentido figurado— y quiero dedicarle algunas líneas a sus comentario.

      • Dice Ud. y lo dice bien que las lenguas son como los seres vivos: nacen, crecen, se reproducen y mueren. Basta con echar un vistazo diacrónico a la evolución lingüística de la humanidad para corroborar lo que Ud. dice y yo comparto.

      • La pretensión de los sucesivos Gobiernos de la Generalitat de cambiar, como en los años del “milagro español”, la mesa de roble o de castaño (el ESPAÑOL, hablado por varios cientos de millones de locutores, en varios continentes, y que vehicula una tradición cultural sin parangón) por una de formica (el CATLÁN, utilizado por dos o tres millones) es un mal negocio y un empobrecimiento lingüístico y cultural de los ciudadanos de Cataluña. Esto es propio de Abundio, ese personaje de la tradición “refranera” española que vendió el coche para comprar gasolina.

      • En cualquier aprendizaje, la motivación, la empatía, el interés, la funcionalidad de lo que se va a prender, el amor hacia lo aprendido,… es fundamental. Todo esto facilita y propicia un aprendizaje rápido y competente de lo enseñado. Pretender imponer el aprendizaje del catalán, ninguneando y marginando el del español, es seguir un camino, psicopedagógico y metodológico equivocado, que sólo puede conducir al fracaso de la enseñanza-aprendizaje del catalán y del español. Y esto conduce inexorablemente, no hacía el bilingüismo, sino hacia el SEMILINGÜISMO: el desarme lingüístico de los ciudadanos de Cataluña (niños, adolescentes, jóvenes y adultos).

      • Y, como Ud. subraya al final de su comentario, mientras se dedican recursos y energías en una política lingüística castradora, la casta política catalana considera “absurda la labor de mejorar la sanidad pública o la no menos ignominiosa tarea de crear empleo”.

      Un cordial saludo, desde cerca de Babia, en sentido propio, no en sentido figurado,

      Manuel I. Cabezas
      14 de agosto de 2014

      Eliminar
  2. El problema es que el bilingüismo debería ser una circunstancia pero no es así. Resulta que el catalán esta impuesto por ley para que no se extinga como el esperanto (curiosamente inventado por un judio). Si no se ponen leyes que protejan el catalan, éste se vera irremediablemente inmerso en un proceso de retroceso hasta llegar a su eliminación practicamente total.

    ResponderEliminar
  3. la verdad está ahi afuera24 de julio de 2014, 11:25

    entonces será porque la gente no lo quiere, si lo quisiera en general no tendria que desaparecer.

    El mayor problema en España es el paro
    el segundo son los politicos

    Hay políticos en Cataluña que se empeñan en GASTAR millonadas para que el idioma que se habla, que se quiere, no se haga. El español prácticamente desterrado en la escuela, no pasa en ningún pais del mundo, que se destierre el idioma del país para 'que no desaparezca' el regional.

    Esa es la realidad, millones en lobotomizar que es un derecho, mientras tanto los niños no tienen que comer en Cataluña, según datos de Caritas.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gabriel del Castillo Genis26 de julio de 2014, 12:25

      Soy Hisdpano hablante , aunque llevo, muchos años, residiendo en Valencia.. Leido que fué, el interesante y aleccionador escrito de D. Manuel I. Cabezas y los tres comentarios , aunque pensé en contestar alNúmero 3 ,que es el único que va firmado, dexcisdo que esto que escribo vale para lños tres, cuya oinión es pareja aunque no sea idéntica, Yo que ría añdir que ,e4l gravísimo problema de la "Inmersión Linguística se basa en una de las memeces semánticas de nuestra Constitución aprobada en 1978. Com consecuencia de esa meytedura de pata de los "Padres de aquelllo, en España no se habla el Español sino el Castellano y ,por tanto aunquer sea el idioma mayoritario y , por tanto el llamado "vehicular ¿?, rulta ser el enguaje de una de las comunidades y p, por tanto, desde el punto de vista de los nbacionalismos , no tiene porque tener ninguna prevalencia. La Constrituvción Española esta salpicada de lagunas semánticas como esta que constantemente son fuente de, tan graves que consiguen demasiado frecuentementre , el desacuerdo delos miembros del TC. problemas interpretativos.

      Eliminar
    2. Sr. del Castillo,

      • Más que de “LAGUNAS SEMÁNTICAS”, habría que hablar de “AMBIGÜEDADES SEMÁNTICAS”, que permiten interpretar el texto constitucional, como se dice en francés, “à la tête du client”. Y esto es muy grave, ya que entre estas ambigüedades y la inseguridad jurídica sólo hay un paso, que se ha dado muy frecuentemente.

      • Si a esto añadimos que el TC está compuesto de miembros y “miembras” —como diría la ínclita Bibiana Oído, de triste recuerdo— nombrados a dedo por los de la casta política de turno: blanco y en botella; y España convertida en la casa de “tócame Roque” o en un “patio de Monipodio”.

      Un cordial saludo,

      Manuel I.
      15 de agosto de 2014

      Eliminar
  4. Señores o Señoras “descarados” (sin cara) y “desalmados” (sin alma, cuyo reflejo es el rostro), que han colgado aquí, en HONESTIDAD RADICAL (HR), sus comentarios sin ser rubricados:

    • Quiero decirles que no me gusta tener comercio lingüístico con seres anónimos que se pasean por las redes sociales en burka y que reniegan de sus hijos lingüísticos. Creo que esto no es serio y además facilita el saltarse a la torera las reglas de la cortesía lingüística. No estamos perpetrando ningún delito, sino haciendo uso de nuestro derecho a la libertad de expresión. Y por lo tanto, ¿por qué tirar la piedra lingüística y esconder el nombre?

    • Dicho esto, en sus comentarios ponen Ustedes el dedo en dos llagas importantes y sangrantes. Por un lado, coincido con el “descarado” que afirma que sin meterla con calzador, la lengua catalana desaparecería ante el español (el constitucional castellano); en efecto, los ciudadanos saben qué lengua les interesa más desde el punto de vista cultural, laboral y social. Y por el otro, comparto con el “desalmado” que escribe que, en Cataluña, hay problemas más graves y que demandan una solución urgente: por ejemplo, “los niños que no tienen qué comer en Cataluña, según datos de Caritas”.

    Un cordial saludo, “descarado” y “desalmado”, y, por favor, no utilicen más el burka,

    Manuel I.
    15 de agosto de 2014

    ResponderEliminar
  5. Afortunat qui va posar com a alias a l'acadèmic Cabezas "far d'Alexandria": fa segles que no guia altre vaixell que algun de governat per un capità psicòtic.

    ResponderEliminar